Femicidio y violencia contra la mujer

El Femicidio y la Violencia Contra la Mujer, fue tipificado en Panamá  mediante la Ley 82 de 24 de octubre de 2013.

 

Esta ley en su artículo número 4 define el femicidio como: “causar la muerte a una mujer basada en la pertenencia al sexo femenino, por causa de la discriminación o cualquier otra forma de violencia”.

 

La reglamentación de esta Ley contempla, entre sus aspectos fundamentales, la coordinación interinstitucional para aplicar políticas públicas efectivas en la atención y prevención de todas las formas de violencia, donde indica que debe hacer cada institución como acciones concreta.

 

De acuerdo con estadísticas del Ministerio Público (MP), de enero a agosto de 2018, se han registrado 12 casos femicidio y 6 por tentativa de femicidio, mientras vemos en años anteriores:

 

AÑO	FEMICIDIO	TENTATIVA DE FEMICIDIO
2014	25	13
2015	29	17
2016	19	4
2017	18	13
2018	12	6

 

 

El común denominador de los hombres que han asesinado a mujeres es porque tienen una pobre autoestima, pésimo merecimiento de sí mismo, no se sienten amados, no tienen un manejo de las emociones porque tienen un empecinamiento y sentimiento machista de que son los que mandan.

 

Desde nuestra experiencia en la Fiscalía de Familia y el Menor por más de 7 años, pudimos constatar que no hay un perfil de persona específico de este tipo de agresor, todos pueden serlo, es decir son varones educados, trabajan, son profesionales, tiene títulos y hasta cursan sus estudios universitarios.

 

Vemos un hecho común en este tipo de casos, relacionado al estallido de violencia que surge cuando las mujeres quieren terminar la relación o la han culminado, porque quiere darse la oportunidad de salir de una relación toxica y que por lo general viene de largos ciclos de violencia doméstica, llamese verbal, física, psicológica, patrimonial, etc.

 

Un testimonio real de tentativa de Femicidio, fue el de mi querida heroína y hermana Juanita Ríos quien teniendo una relación sentimental de varios años fue gravemente herida por su pareja que intentó cegarle la vida propinándole 20 puñaladas en distintas partes del cuerpo, que le perforo los pulmones, el estómago, intestino grueso delgado, brazos , manos cuellos, por lo cual casi pierde la vida, cuyas secuelas la misma sufre hasta el día de hoy, para el año 2007 cuando ocurre este trágico hecho como muchas mujeres estoy segura porque lo veía a diario en la Fiscalía donde laboraba, no se consideraba el femicidio como un delito y no tenía una pena de prisión, indignante no creen, en el caso de mi hermana ella tenía cinco hijos, tres menores de edad, imagínense el trauma que vivieron y que hubieran vivido si ella hubiera muerto, por nuestros niños debemos hacer docencia, prevenir y orientar pongamos nuestro granito de arena.

 

Hoy mi hermana tiene 54 años de edad y pudo contar su historia fue maltratada física y emocionalmente por su pareja y padre de sus hijos. Si ella pudo romper la cadena de violencia usted también siempre han sido sus palabras, aunque las secuelas pudieron ser nefastas afortunadamente todos sus hijos crecieron sanos, fuertes y terminaron sus estudios y menciono esto porque muchas veces el temor de las mujeres, es si me voy como hago con mis hijos, no trabajo, no tengo dinero, etc., piense si se queda todo el daño emocional que le causa a sus hijos, quienes de seguro se convertirá en un agresor o agresora, producto de esta vida en la cual es nada más otro eslabón en esa gran cadena de violencia que viven  en su infancia.

 

Los femicidios desde mi perspectiva provienen de los altos índices de violencia doméstica, cuyos ciclos no son rotos a tiempo, generalmente es un ciclo que se inicia con la luna de miel, la tensión, las agresiones y nuevamente la reconciliación. Las víctimas no se percatan del laberinto sin salida en el que se encuentran, viven esperanzadas en que la pareja va a cambiar colocan la denuncia, pero luego piensan que es una situación que va a mejorar por sí sola y que lo pueden controlar, pero la realidad es que esto puede llegar a un desenlace fatal, otro factor que incide en el desistimiento de las víctimas de la denuncia de Violencia Doméstica, es lo tedioso del proceso judicial porque es  largo y muchas veces la demora ocurre porque la cantidad de denuncias que se reciben en los despachos de las Fiscalía de Familia y el Menor es bien alto, yo personalmente en el año 2001, podía ver como cada oficial mayor podía tener bajo trámite hasta 200 expedientes, dotar a las Fiscalía del Recurso Humano necesario y comprometido es muy importante de lo contrario solamente se dedicarán a cerrar los expedientes.

 

Ahora bien en conclusión lo importante es que ahora si tenemos una ley que tipifica el Femicidio, pero necesitamos que los casos de violencia doméstica sean atendidos con eficiencia para que la víctima no vuelva al ciclo y termine convirtiéndose en una más de las estadísticas.

 

La violencia doméstica no distingue, genero, edad, ni raza consiste en el hostigamiento o agresión de forma física, verbal, psicológica o patrimonialmente  a otro miembro de la familia.

 

Muchas víctimas deciden buscar ayuda a sus problemas después de contar con los consejos legales y es lo que intentamos hacer aquí, denuncie, rompa el silencio. También es necesario buscar el apoyo de un psicólogo, es decir la ayuda debe ser integral para romper el ciclo.

 

Requisitos para la denuncia:

• No requiere de ningún tipo de formalidad.
• La denuncia puede ser presentada por la víctima, familiares, o un tercero conocedor del hecho, ante la Fiscalía de Atención Primaria del área de su residencia, Corregiduría, Juez de Paz, Centro de Recepción de denuncia del Ministerio Público.
• Información valiosa al momento de presentar una denuncia aunque no es obligatoria:
• Nombre de la persona agresora y de ser posible dónde ubicarla (teléfono, dirección).
• Precisar el vínculo existente entre la víctima y el agresor.
• Dirección o lugar del hecho.
• Nombre de testigos, si cuenta con ello.